Julián Aguirre nació en Buenos Aires el 28 de enero de 1868
y falleció en la misma ciudad el 13 de agosto de 1924. De niño se trasladó con
su familia a Madrid, donde estudió piano, armonía y contrapunto en el
Conservatorio Real de Madrid, siendo discípulo de Emilio Arrieta y Carlos Beck.
Más tarde recibió formación complementaria en París. Posteriormente ejerció la
docencia en su ciudad natal, donde en 1916 fundó la Escuela Argentina de
Música.
Su labor pedagógica como crítico musical en diversas
publicaciones argentinas del momento resultó, asimismo, particularmente
relevante.
Iniciador del nacionalismo folklórico en la música de su
país, fue el primer compositor argentino que buscó inspiración en la música
vernácula, desprendiéndose de las formas técnicas impuestas por el verismo y el
wagnerismo en boga, aunque sin librarse totalmente de la influencia romántica
de España. Su condición y su preferencia por explorar la intimidad lo
condujeron imperceptiblemente al género de cámara.
Cabe en este sentido establecer dos etapas en su obra,
particularmente en la pianística y para canto y piano, que constituye de hecho
las cuatro quintas partes de su producción. La primera es de carácter
universalista, bajo el influjo de los estudios efectuados en Europa tanto en la
temática como en la escritura, con recuerdos de Schumann en algunos trozos como
en las Intimas para piano. Hacia fines de siglo se iniciaría la segunda etapa,
el período nacionalista, con los Aires criollos, los Aires populares y los
Tristes, que alcanza madurez en las Canciones y Danzas para piano y en los
ciclos de Canciones argentinas y Canciones escolares.
Una ley nacional del año 1926 dispuso erigir un monumento en
su memoria en El Rosedal del Parque Tres de Febrero de Buenos Aires, un busto
de bronce que fue costeado por subscripción pública e inaugurado en 1934.
En el año 1960 se designa al Conservatorio oficial de la localidad
de Banfield con el nombre de Julián Aguirre, a fin de rendir homenaje a la
memoria del ilustre compositor argentino según Res. Min. 678/60 del Ministerio
de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires.
La obra de Aguirre incluyó tanto piezas para piano y composiciones de
cámara - en las que se reflejaba la influencia de la música francesa - como
versiones orquestales de temas criollos, que sometió a una profunda depuración
estilística.
Entre sus composiciones más conocidas se pueden citar: