En 1810 comenzó su carrera militar siendo distinguido el 6 de julio de ese año y abanderado al años siguiente; asciende a teniente en 1812 y a ayudante Mayor en 1813 y Capitán en el mismo año;
Para 1820 es ascendidos a Mayor graduado en y a Teniente Coronel en 1822.
Rivadavia lo asciende a Coronel el 1° de marzo de 1827, Durante sus 17 años de carrera militar sirvió en el Regimiento 6 de Infantería (Alto Perú), Batallón de Dragones (Perú), Batallón Regimiento de Infantería de Línea “Río de la Plata”, de los Andes y Regimiento de Caballería de Línea N° 17.
Participó en la campaña del Alto Perú a las órdenes del General Juan Ramón Balcarce combatiendo en las Batallas de Cotagaita, Batalla de Suipacha y Huaqui, en 1810 y 1811, y a las órdenes del General Manuel Belgrano en Las Piedras, Tucumán, Salta, Vilcapugio y Ayohuma (1811, 1813).
En esta última batalla fue herido y hecho prisionero durante 7 años.
En 1820 fue incorporado al Ejército Libertador y en 1825, en reconocimiento a sus méritos, fue nombrado por Simón Bolívar Prefecto del Departamento de Ayacucho, puesto al que renunció poco tiempo después siendo erróneamente es involucrado en una conspiración, y por orden del mismo Simón Bolívar es apresado.
Habiendo sido declarado inocente meses después, recibe la orden de regresar a su país en octubre de 1826. Reintegrado a su patria le fue asignada, en San Juan, la tarea de organizar escuadrones de Caballería.
Trasladado a Buenos Aires, se le confió el mando del Regimiento 7.º de Caballería de Línea, que guarnecía el Fuerte Independencia situado en Tandil.
Fue cumpliendo esta misión que partió de Tandil, al mando del Regimiento 7 de Caballería, para fundar el 11 de abril de 1828, un fuerte, al que llamó Fortaleza Protectora Argentina que tenia como función de proteger el ganado codiciado por el indio, y la costa de la flota de Brasil ,siendo hoy la ciudad de Bahía Blanca , siendo este su último acto trascendente.
Un año después regresó a Buenos Aires, para sumarse a las tropas del rebelde Juan Lavalle. Es enviado tras el establecimiento de Lavalle en la ciudad a "pacificar" el interior de la provincia, tarea que lleva a cabo mediante degüellos y fusilamientos a discreción.
De nuevo en Buenos Aires comenzó a desvariar y, víctima de la locura, fue internado en el Hospital General de Hombres. En una ocasional salida, el coronel murió en la calle, de donde fue recogido por la policía.
Su cuerpo fue inhumado el 2 de junio de 1829, en el Cementerio del Norte (hoy, Recoleta).
En el año 1978 se localizó el lugar en el cual estuvo su sepultura, pero al intentar extraer sus restos y no hallarlos, se consideró que los mismos se habían "resumido" en la tierra, que fue tomada en una urna que fue situada en el atrio de la Catedral de Bahía Blanca.