Esta especie corresponde a un género muy difundido en América del Norte, de dinosaurios herbívoros conocidos como de "pico de pato". Esta curiosa distribución hace admitir que este grupo colonizó América del Sur, a través de conexiones físicas, que permitieron un variado intercambio de faunas terrestres en ambas direcciones. Fue encontrado en la Formación Los Alamitos, provincia de Río Negro por una expedición paleontológica del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia de Buenos Aires en 1984. Vivió en el Cretácico Tardío hace unos 80 millones de años, medía unos 10 metros y unos 3 de altura.

Descubierto por: una expedición paleontológica del Museo Argentina de Ciencias Naturales dirigida por el Dr. José F. Bonaparte en 1984.
Estudiado por: José Bonaparte, Frenchi, J. Powell y Sepúlveda, 1984.
Período: Cretácico Tardío (80 millones de años)
Longitud: 10 metros y 3 metros de altura
Localidad: Formación Los Alamitos, provincia de Río Negro.
Exhibición: Museo Argentino de Ciencias Naturales, Buenos Aires

Elementos hallados:
1- Pelvis
2- Extremo distal de fémur
3- Fémur (1 metro)
4- Parte occipital de un cráneo incompleto
5- Coracoides derecho
6- Fragmento de cráneo
7- Pieza del esternón
8- Escápula izquierda
9- Región de la sínfisis de ambos dentarios

Características principales: Kritosaurus australis está basado en varios esqueletos incompletos de la Formación de Los Alamitos. El rasgo que diferenciaba a estos dinosaurios era la prolongación de la parte anterior de la cara, formando un hocico ancho y aplanado, con un pico desprovisto de dientes semejante al de un pato. La morfología de los tres huesos de la pelvis coincide muy bien con las características anatómicas en Kritosaurus navajovius de América del Norte. Pero pequeñas diferencias se ven en algunas piezas, particularmente en los huesos de las extremidades. Las semejanzas del material craneano que es posible comparar de Kritosaurus australis con las distintas especies de "Kritosaurus" de Norteamérica son notables en las regiones frontal y occipital, como así en la morfología del esternón, escápula, húmero, etc.
Se piensa que estos hadrosaurios colonizaron Sudamérica relativamente rápido, al punto que el tiempo transcurrido no habría sido suficiente para generar modificaciones notables como producto del nuevo ambiente en que vivieron. Obviamente la colonización de América del Sur por estos ornistiquios fue exitosa ya que atravesaron todo el continente de norte a sur, alcanzando latitudes relativamente altas en la Patagonia central.