por Roberto Proctor:
"Después de marchar ocho leguas llegamos al llano de Chacabuco, de larga fama por la victoria de San Martín sobre el ejército español. Es de grande extensión, la mayor parte cultivado, con algunas casas importantes anejas a los diferentes fundos. Sin embargo, colinas secas de arena están diseminadas en todos los rumbos, aunque el campo en general sea bastante abierto y, por consiguiente, muy apropiado para evoluciones de caballería de que siempre se enorgullecieron los españoles de América. Los ejércitos eran casi iguales en número, cada uno de cuatro mil hombres, aunque los españoles deben haber estado en mejor condición que las tropas de San Martín.
"Pasamos la noche junto al campo de batalla, en un rancho ruin, sin más que un cuarto y éste ocupado por la familia; de modo que nos vimos precisados a dormir a la intemperie, disponiendo una especie de cobertizo con estacas y una frazada, como habíamos hecho en el corazón de los Andes. Aunque habíamos visto muchas casas tolerables en el camino, ahora era obscuro y demasiado tarde para volver: todo lo que podía era hacer de tripas corazón en nuestro mal hospedaje. De acuerdo con esto, entramos en la casa y nos sentamos, entreteniéndonos en ver la familia hasta que llegó la cena. La única porción de la familia que permanecía en el rancho, eran tres muchachonas atareadísimas en hacer pan de harina y grasa, mezcladas, golpeado violentamente con las manos y sobado en una batea semejante a artesa de carnicero. Esta ocupación era ejercicio muy duro y las muchachas se turnaban: sin embargo no les impedía cantar la célebre canción nacional chilena, compuesta a raíz de la victoria de San Martín en las inmediaciones. Lamento no recordar sino la primera estrofa y el coro, así concebidos:
"¡Ciudadanos! el amor sagrado de la Patria os convoca a la lid; Libertad es el eco de alarma, La divisa triunfar o morir. El cadalso o la antigua cadena Os presenta el soberbio español; Arrancad el puñal al tirano, Quebrantadle su cuello feroz. CORO ¡Dulce Patria! recibe los votos Con que Chile en tus aras juró: Que, o la tumba serás de los libres O el asilo contra la opresión. "
El coro en que se unían todas las voces era particularmente armonioso."
Roberto Proctor. Viajero inglés que cruzó la cordillera de los Andes, dos años después que el ejército libertador de San Martín.