La influencia de Perón hasta ahora es pequeña, pero el terremoto de San Juan lo lanza a la consideración pública: Perón organiza la ayuda, habla por radio, preside festivales solidarios, y en uno en el Luna Park se vincula con una estrella radial en ascenso Eva Duarte . En marzo, con la promoción a la presidencia de su jefe, el general Farrell, lo coloca al frente del estrategico Ministerio de Guerra, desde donde logra eliminar a sus competidores, los coroneles González y Perlinger. Mientras Farrell se entretiene tocando la guitarra, Perón maneja la situación en el Ejército, se hace nombrar presidente del Consejo de Posguerra y hasta gana la solidaridad de los aeronautas, que lo nombran aviador honorario. Se sabe que mantiene contactos con políticos de derecha e izquierda. Pero lo que más rédito le da es la Secretaria de Trabajo y Previsión, ese destino sorpresivamente elegido a fin de año, una pequeña muchedumbre le da las gracias, por primera vez, por lo hecho. Last, but not least, la revista Time le dedica su tapa.
El año comienza con el reconocimiento del golpe de estado en Bolivia y la asunción del gobierno boliviano por Gualberto Villarroel, este golpe no es reconocido por los Estados Unidos.
Las tratativas con el régimen nazi que llevaba a cabo el agregado cultural argentino en Madrid, Juan Carlos Goyeneche, fueron descubiertas por el servicio de radioespionaje norteamericano Magic, que interceptó cables enviados desde Berlín a la embajada alemana en Buenos Aires por el nacionalista “restaurador” argentino. Esos despachos debían ser entregados al coronel Juan Perón, entre otros.
En un intercambio de cartas con Hitler, y en conversaciones privadas con Heinrich Himmler, el jefe de las temidas SS, y con el ministro de Relaciones Exteriores, Joachim von Ribbentrop, Goyeneche había abordado cómo solucionar la situación política del presidente Castillo. Esto causa que en España la cesantía del cónsul Hellmuth, que es sorprendido en misión a Alemania.
Debido a las presiones norteamericanas por dos hechos el apoyo al golpe en Bolivia y el intento de compras en Alemania unido al caso de espionaje debilitaron el gobieno de Ramirez con lo que el 24 de febrero, el general Pedro Pablo Ramírez fue inducido por el Grupo de Oficiales Unidos a renunciar a la presidencia luego de que el gobierno argentino, incapaz de sostener la presión externa, rompiera relaciones diplomáticas con Alemania y Japón, el 26 de enero.
La renuncia dejó a la Revolución del 43 en manos del ministro de Guerra, general Edelmiro Farrell y, tras él, de los coroneles Juan D. Perón y Domingo Mercante, líderes del GOU.
En contraste con el “nacionalismo elitista” que sostenía a Ramírez, el dúo Farrell-Perón se propone conformar un nacionalismo popular orientado a una salida democrática del régimen. El proceso se desencadenó el 3 de enero, cuando Ramírez reconoció al nuevo gobierno boliviano, derivado de un golpe de Estado liderado por Gualberto Villarroel.
Estados Unidos reaccionó enérgicamente, denunciando que la Argentina había promovido ese golpe, y enviando al Río de la Plata un portaviones, como amenaza, que ancló en Montevideo.
Edelmiro Farrell con su gabinete en la foto están Alberto Tesaire , Diego Masón, Juan D. Perón , Orlando Peluffo y Juan Pistarini
El terremoto en la provincia de San Juan dejó un tendal de muertos y de ruinas, mientras que, en Buenos Aires, en el encuentro a beneficio de las víctimas, aparecieron los indicios de un sorpresivo amor. El de la casi desconocida actriz Eva Duarte y el coronel Juan Domingo Perón.
Los asistentes a ese encuentro convocado por el gobierno del general Ramírez y el secretario de Trabajo Perón son los testigos de que esa noche en el Luna Park el coronel y Duarte fueron inseparables.
La joven actriz, sacudida por los brutales alcances de la catástrofe que causó el sismo de casi 8 grados en la escala de Richter, apenas a veinte kilómetros del centro de la capital sanjuanina, fue de las primeras y más empeñadas en ofrecer su ayuda y su entrega , al igual que sus colegas del teatro y de la radio, pasó horas involucrada en la recaudación de fondos y se ofreció a participar en los planes de asistencia y de reconstrucción.
Como es el coronel quien lidera el esfuerzo social y económico, ese diálogo intenso ocurrido en el Luna Park no resulta casual. Aunque no forma parte de la crónica de un acontecimiento trágico permitirse especulaciones de situaciones privadas, permítaseme la trasgresión.
La de intuir las probables consecuencias de aquel encuentro de ambos. Acaso el terremoto más destructivo de que se tenga noticias entre nosotros, ese temblor que atravesando kilómetros hizo a su vez temblar muebles, caer cuadros y estallar lámparas en Buenos Aires, consiga producir la reacción vital.
En estos pocos días se han enterrado muertos y se han desenterrado vivos; parte de la historia y de edificios emblemáticos de San Juan ya son escombros. En una situación mundial de guerra, el infortunio de este desastre natural nos impone una más dura carga de desánimo y de impensables consecuencias psicológicas. Ya hay sanjuaninos que sólo quieren emigrar, que consideran inútil rehacer sus hogares donde no hay más que desolación. En este contexto la reacción de la secretaría a cargo del coronel y responsable del rescate social se percibe como una esperanza cierta.
No es tangencial ni anecdótico suponer que el diálogo en el Luna Park del 22 de enero entre la desconocida actriz y el cada día más popular coronel sea para el país una promesa. Este relato aún escrito en un clima de desasosiego se atreve a atribuirle a ese encuentro un significado simbólico.
Ellos, Perón y Eva Duarte, son dos argentinos que se afanan en unirse en una épica que se avecina transformadora. Quizá revolucionaria. Ese mutuo acercamiento es un indicio. Ojalá desde las ruinas del terremoto ese vínculo todavía naciente aliente a la ilusión.
El 17 de febrero de 1944 el gobierno realizo una emitio una serie de 100.000 estampillas de correo con fines de beneficencia por el terremoto sanjuanino en ellas se veia un mapa de Argentina y resaltada la provincia de San Juan
El 26 de febrero, Farrell nombró a Perón ministro “interino” de Guerra. Fue la solución negociada que había implicado la puja por el cargo.
Es que la mayoría de los jefes que tomaron parte en la deposición de Ramírez (diez de diecisiete) hubiesen preferido al general Sanguinetti sobre Perón, en parte porque la antigüedad de Perón en el grado de coronel (2 años y dos meses) no era la suficiente. Finalmente se llegó a la solución del interinato.
Por entonces, la posición de Perón no estaba asegurada, aunque el derrocamiento de Ramírez eliminó del poder a una de las facciones, también es cierto que inició un nuevo capítulo en la lucha interna.
El principal antagonista de Perón en esta coyuntura era el general Perlinger que, aunque no había participado en la revolución de junio, estaba conquistando ahora el apoyo de los antiguos dirigentes del GOU, como los coroneles Julio Lagos y Arturo Saavedra.
Perón llevó como jefe de la secretaría del Ministerio a Franklin Lucero, el agregado militar en Chile, que, si bien había participado en octubre de 1941 en el planteo de los tenientes coroneles a Castillo, no pertenecía al GOU por su ausencia en el extranjero.
En junio, Perón fue designado vicepresidente de la Nación con retención de sus demás cargos.
Por decreto 14.538 del 3 de junio de 1944, se organizó y reglamentó el aprendizaje y trabajo de los menores y se creó la Dirección de Aprendizaje y Trabajo de los Menores, dependiente de la Secretaría de Trabajo y Previsión, a cargo del general Juan Domingo Perón.
El objetivo es “propender al mejoramiento moral y material de los trabajadores” ya que “si el obrero aumenta su nivel cultural y técnico podrá esperar y pretender un lógico acrecentamiento de su capacidad de producción y, en consecuencia, salarios más altos y una mejor ubicación en los cuadros sociales”. La creación se fundamenta en los imperativos de la justicia social y se propone satisfacer las exigencias del “creciente desarrollo de las industrias argentinas”, necesitadas cada vez más de personal especializado.
En febrero de 1944 el dúo Farrell-Perón desplazó a Ramírez de la presidencia, y fue designado Perón para el estratégico cargo de ministro de Guerra el 24 de febrero de 1944 y al día siguiente Farrel en la Presidencia de la Nación, primero interinamente y definitivamente a partir del 9 de marzo. Como Secretario de Trabajo Perón realizó una obra notable, haciendo aprobar las leyes laborales que habían sido reclamadas históricamente por el movimiento obrero argentino (generalización de la indemnización por despido que existía desde 1934 para empleados de comercio, jubilaciones para empleados de comercio, Estatuto del Peón de Campo, creación de la justicia laboral, aguinaldo, dando más eficacia a la policía de trabajo ya existente para garantizar su aplicación e impulsando por primera vez la negociación colectiva, que se generalizó como regulación básica de la relación entre el capital y el trabajo. También dejó sin efecto el decreto-ley de asociaciones sindicales sancionado por Ramírez en las primeras semanas de la revolución, que era criticado por todo el movimiento obrero. De la mano con esta actividad Perón, Mercante y el grupo inicial de sindicalistas que concretaron la alianza (los socialistas Borlenghi y Bramuglia, principalmente), comenzaron a organizar una nueva corriente sindical que iría asumiendo una identidad laborista-nacionalista. Durante 1944 Farrell impulsó decididamente las reformas laborales que proponía la Secretaría de Trabajo. Ese año el gobierno convocó a sindicatos y empleadores a negociar convenios colectivos, un proceso que no tenía precedentes en el país. Ese año se firmaron 123 convenios colectivos que alcanzaban a más de 1.400.000 obreros y empleados y al año siguiente se firmarían otros 347 convenios que cubrirían a 2.186.868 trabajadores
En enero de 1944 con motivo del terremoto de San Juan, en un festival de solidaridad, Eva Duarte conoció al coronel Juan Perón, secretario de Trabajo y Previsión, y muy pronto fue a vivir con él, en el departamento de la calle Posadas.
Con el poderoso apoyo de Perón la actríz, Eva Duarte potencio su carrera artística Radio Belgrano le hizo un nuevo contrato, por una suma importante, y los Estudios San Miguel la incluyeron en el elenco de la película La cabalgata del circo, con Libertad Lamarque y Hugo del Carril, que dirigió Mario Soffici.
Eva Duarte ya rubia, apareció varias veces en las tapas de las revistas y en reportajes como el que se reproduce. Radiolandia, fundada por Julio Korn en 1935, era una de las dos o tres revistas consagradas al cine y la radio.
El reportaje a Eva Duarte, titulado “Triunfadora, Eva Duarte vive la etapa decisiva de su lucha artística”, es muy característico de ese género periodístico.
Desde junio de 1944 Eva Duarte comenzó a hacer un nuevo programa: Hacia un futuro mejor, por Radio del Estado, dedicado a promover la obra del gobierno militar, y en particular de Perón.
Con libretos de Muñoz Azpiri que se desmpeñaba como director de Propaganda de la Presidencia, en el programa Eva encarnaba a una mujer de pueblo, que llamaba a apoyar la revolución de junio y un apoyo a Perón.
Evita y Libertad (1944) Eva Perón y Libertad Lamarque aparecen juntas durante la filmación de las película La Cabalgata del Circo.
Se realiza la primera transmisión experimental de televisión. Luis Sandrini hace en radio Felipe, con libro de Miguel Coronatto Paz; actuará 23 años. Iván Casadó inicia los programas de preguntas y respuestas con El pozo Bidú. Mores y Contursi ganan el Premio Mejoral de Tango con Cristal interpretan Troilo y Marino. Lucas Demare filma Su mejor alumno, con Magaña y Muiño.
Después de diez años de crecimiento espectacular, el cine nacional enfrenta problemas ya que por el tema de la guerra escasea la película virgen y además los exhibidores prefieren los filmes de Hollywood.
El gobierno establece pautas de exhibición: para las salas de estreno, una película nacional cada dos meses como mínimo, durante una semana completa; las céntricas, una por mes, y en las restantes dos semanas de cada cinco para el cine nacional. No para allí la reglamentación los productores deben realizar al menos una película por año con argumentos nacionales, y con elenco totalmente argentino.
Aún no existe la Secretaría de Prensa y Difusión; el control queda a cargo de una Junta Arbitral Cinematográfica.
Su mejor alumno es una película argentina en blanco y negro, dirigida por Lucas Demare, protagonizada por Enrique Muiño y Ángel Magaña. Estrenada en Buenos Aires el 22 de mayo de 1944. Obtuvo cinco premios, entre ellos el premio como mejor película del año. La película relata la historia real del hijo natural de un expresidente de Argentina y padre de la educación pública del país, Domingo Faustino Sarmiento (Enrique Muiño), de nombre Domingo (Ángel Magaña), según los relatos autobiográficos del primero. Dominguito se presentó a pelear como voluntario en la Guerra de la Triple Alianza en la que murió.
Por decreto 14.538 del 3 de junio de 1944, se organizó y reglamentó el aprendizaje y trabajo de los menores y se creó la Dirección de Aprendizaje y Trabajo de los Menores, dependiente de la Secretaría de Trabajo y Previsión, a cargo del general Juan Domingo Perón.
El objetivo es “propender al mejoramiento moral y material de los trabajadores” ya que “si el obrero aumenta su nivel cultural y técnico podrá esperar y pretender un lógico acrecentamiento de su capacidad de producción y, en consecuencia, salarios más altos y una mejor ubicación en los cuadros sociales”. La creación se fundamenta en los imperativos de la justicia social y se propone satisfacer las exigencias del “creciente desarrollo de las industrias argentinas”, necesitadas cada vez más de personal especializado.
Perón habla en la Bolsa de Comercio, donde se ofrece para contener los conflictos sociales, y en la Universidad de La Plata, inaugurando la Cátedra de Defensa Nacional, donde defiende un programa de movilización total. El lº de Mayo, luego de prohibir el acto de la CGT, anuncia por radio una serie de medidas sociales. En los meses siguientes se firman numerosos convenios colectivos de trabajo, se incorporan cláusulas sobre vacaciones y licencia, se extiende el feriado dominical.
El Estatuto del Peón norma por primera vez cuestiones salariales y laborales en el mundo rural. Perón .convoca a dirigentes sindicales: Borlenghi, de Empleados de Comercio, lo apoya; se opone Pérez Lei-rós, del Sindicato de Obreros Municipales, que es inter-venido. A fin de año 200.000 trabajadores se reúnen para apoyar las reformas. Repetto y otros dirigentes po-líticos se marchan a Montevideo, y trabajan por una coalición democrática, a la que se opone el radical Amadeo Sabattini, qué funda Intransigencia.
Por la liberación de París se realiza una gran manifestación opositora: Viva la Francia Libre y la Argentina Libre, proclama Alfredo Palacios; la policía reprime y dispersa a los asistentes.
Aparece la moda militar entre las mujeres se imponen el traje sastre oscuro, los sacos con hombreras y las polleras rectas. La Aeronáutica se constituye como arma autónoma. Se créa el grado de General de Ejército. Fabricaciones Militares inaugura dos fábricas, de conductores sintéticos y de tolueno. Comienzan a operar los hornos de fundición de Gurmendi, Santa Rosa y Acíndar; Tamet agrega un tercer horno. Se crea el Banco de Crédito Industrial. Se instalan las empresas norteamericanas Bausch y Lomb, y Dorothy Gray. Las usinas eléctricas funcionan quemando leña y maíz. En Córdoba se inauguran los diques La Viña y Cruz del Eje, y el nuevo dique San Roque.
El Estatuto del Peón Rural en Argentina, fue un decreto del Poder Ejecutivo Nacional (n° 28.169, de 1944) dictado durante la presidencia de facto del general Edelmiro Farrell por el cual por primera vez se reguló el trabajo rural de acuerdo a los principios del Derecho Laboral y por su recuerdo se estableció el 8 de octubre como día del trabajador rural
El 16 de noviembre salió a la venta una nueva revista, Rico Tipo. Es un semanario de humor fundado y dirigido por Guillermo Divito, uno de los dibujantes más exitosos de Patoruzú, quien decidió independizarse como consecuencia de su mala relación con su jefe, Dante Quinterno, quien le cuestionaba la excesiva sensualidad de los personajes femeninos, siempre vestidos con poca ropa. Los lectores ya celebran las nuevas historietas: Fúlmine (un hombre vestido de negro que atrae la mala suerte), Fallutelli (un adulador del jefe y traidor con sus compañeros), Bómbolo (un gordito bonachón e ingenuo), Gracielita (una joven muy moderna) y El otro yo del Dr. Merengue (de modales impecables por fuera pero pensando lo contrario de lo que hace).
Rico Tipo tuvo dos décadas de gloria: 1940 y 1950. En ellas su tirada y aceptación popular fueron masivas.
La gente adulta se reconocía en sus páginas y en sus personajes y gozaba de ese humor donde las pasiones y la sensualidad no estaban del todo ausentes. Las Chicas de Divito, sobre todo, lanzaban un mensaje de desparpajo que la distinguía de otras publicaciones que buscaban ser más familiares.
Entre los redactores y dibujantes se destacan Oscar Conti, “Oski”; Carlos Warnes, con sus seudónimos César Bruto y Napoleón Verdadero; Alejandro del Prado, “Calé”, Rodolfo M. Tabeada, y Joaquín Lavado. Entre las novedades de la revista se destacan una ácida sección de cine, a cargo de Raimundo Calcagno, “Calki”, y otra de carreras a cargo de Bandera Verde.
La revista Rico Tipo fue un semanario argentino de humor que apareció desde finales de 1944 hasta el año 1972. Fue fundado y dirigido por Guillermo Divito.
La revista alcanzó tal éxito y popularidad que llegó a imponer la moda de la Buenos Aires de su época. Las mujeres querían parecerse a las Chicas de Divito que frecuentemente aparecían en las tapas de la revista. Los hombres soñaban con ese modelo de mujer y también adoptaban los vestuarios de los personajes masculinos que Divito dibujaba: trajes cruzados con chaquetas muy largas y con muchos botones. Las sastrerías sacaban cada temporada "trajes Divito" y hasta hubo "muñecas Divito", como un anticipo de lo que hoy es el merchandising.
El Colegio Nacional Buenos Aires es rebautizado Colegio Universitario de San Carlos. El Consejo de Educación crea la Comisión de Folklore y Nativismo, que dirige Athos Palma. Premio Nacional de Poesía para Francisco Luis Bernárdez. Conferencias sobre psicología psicoanalítica de Enrique Pichon Riviére en el Hospicio de la Merced.
La revista Sur publica Ficciones, de Jorge Luis Borges; incluye Pierre Menareh autor del Quijote y La biblioteca de Babel Se inicia el Teatro Municipal de la Ciudad de Buenos Aires, con Pasión y muerte de Silverio Leguizamón, de Bernardo Canal Feijóo; dirige Orestes Caviglia, con actores del teatro independiente.
En el Teatro del Pueblo, el bandoneonista Alejandro Barletta da un concierto de música clásica. Juan José Cas¬tro estrena en Montevideo La zapatera prodigiosa. Juan Carlos Paz funda la Agrupación Nueva Música, para difundir la música serial y dodecafónica; lo acompañan Francisco Krópfl, Mauricio Kagel y Carlos Rogué Alsina. Revistas: Polifonía. Berni, Castagnino y Colmeiro crean el taller de Arte Mural.
Boca campeón; es el año de Pescia, Corcuera y Sarlanga, se produce un exodo de futbolistas a México; parte José Manuel Moreno.
Santa Fe gana el Campeonato Argentino de Básquetbol. Venado Tuerto, con los Alberdi y los Cavanagh, obtiene por primera vez el Campeonato de Polo.
En Tucumán se funda la Unión de Rugby del Norte. Roberto de Vicenzo se impone por primera vez en el Abierto de Golf de la República. Jorge Molina Salas une a caballo Buenos Aires y Santiago de Chile, en 60 días.
El espectáculo del fopotball crece y la venta de entradas llega a su punto más alto: 3.211.000 en el año, a razón de 13.380 por partido. Los clubes multiplican sus socios: River tiene 27.000; Boca, 23.500, y San Lorenzo, al tope, 33.500. Racing paga 60.000 pesos por el goleador D'Alessandro.
También crecen los intereses en juego, mezclados con la pasión. El Tribunal de Penas vuelve a imponer una severa sanción al club Banfield, que intentó sobornar al arquero Guaico la sanción son 15 fechas de suspensión, y expulsión de los entrenadores Emérico Hirsch y Mario Fortunato, de dos futbolistas y un periodista. En 1941 Banfield ya había sufrido una sanción similar.
El sábado 9 de diciembre fue robado del Museo Nacional de Bellas Artes el cuadro Berger de Lavacourt (Pastor de Lavacourt) de Claude Monet. De la obra sólo quedó el marco apoyado en un rincón, como un malevo malherido.
El lienzo había sido comprado por el Estado argentino en 1912 y es parte de la obra del impresionista francés cuando vivió en Vétheuil y Lavacourt, entre 1879 y 1881, en las afueras de París, luego de haber expuesto 29 pinturas en la Cuarta Exhibición Impresionista, entre el 10 de abril y el 11 de mayo de 1879, en el número 28 de la Avenue de l’Opera.
Este robo maestro se equipará a los misterios que dejaron El indiferente, de Watteau, y La duquesa de Devonshire, sustraídos del Louvre de París y del Gainsborough de Londres, respectivamente.
Monet nació en París el 14 de noviembre de 1840. Formó la escuela impresionista con Camille Pissarro, Pierre-Auguste Renoir y Alfred Sisley. Pintaba paisajes y escenas de la sociedad burguesa contemporánea, buscando la reproducción de la luz del día por medio de una aplicación libre de colores brillantes. Murió el 5 de diciembre de 1926 en Giverny.
El 4 de diciembre hubo una manifestación sindical de apoyo a Perón por la aprobación del régimen de jubilaciones para empleados de comercio. El militar habló ante una multitud de 200 mil personas en un acto organizado por Ángel Borlenghi.
Allí dijo: “He aquí un hecho más de los que algunos malos políticos argentinos han dado en llamar ‘nuestra demagogia’. La previsión social en decretos como el que nos ocupa, estructura y elabora el futuro del país, en la más noble y desinteresada concepción de la solidaridad humana y nacional. Por eso se inspira en la necesidad orgánica de protección estatal a la vejez o invalidez; se afirma en el sentimiento de justa recompensa al esfuerzo y trabajo individual y se nutre en el espíritu de cooperación y hermandad nacional que propugnamos”.
Luego, entre otros conceptos, agregó: “Es incuestionablemente cierto que el mejoramiento de las masas trabajadoras necesita de una potente economía que las respalde. De ello se infiere la necesidad de un permanente coordinamiento de las fuerzas económicas y la conveniencia de establecer los planes necesarios para evitar el debilitamiento económico o el desequilibrio social. Es también innegable que cuando los precios suben obedece a dos causas determinantes: a la inflación natural (por aumento de los costos de producción, circulación o comercialización) o simplemente a la especulación. Si el precio sube como consecuencia de la inflación natural no queda otro remedio que aumentar los sueldos y salario para compensar, impidiendo que una gran masa quede en condición sumergida”.
El 27 de noviembre de 1944 la revista norteamericana Time le dedico la tapa a Juan Domingo Perón y le escribio un árticulo llamado Perón el jefe del GOU, los norteamericanos empezaban a ver el surguimiento de un nuevo lider.
Ángel Gabriel Borlenghi nació el 1 de febrero de 1904. Fue secretario general de la Confederación General de Empleados de Comercio y ministro del Interior. De ideas socialistas, este año comenzó a apoyar a Juan D. Perón luego de la sanción de un decreto que extendía los beneficios de la jubilación y pensión para todos los empleados de comercio y afines.
Afiliado al Partido Socialista, Borlenghi tiene una destacada actuación como dirigente sindical desde 1930. Desde su cargo, estableció relaciones estrechas y formas de acción conjunta con otros sindicatos (los de bancarios, seguros, viajantes de comercio y empleados de farmacias), para impulsar un amplio reclamo al Congreso Nacional para sancionar una ley de contrato de trabajo.
Luego de una extensa lucha, en 1934 el movimiento obtuvo la sanción de la Ley 11.729 de contrato de trabajo en el sector servicios, la ley laboral más importante de la Argentina hasta hoy. Ese éxito lo colocó como uno de los dirigentes sindicales más importantes del país, junto con José Domenech y Francisco Pérez Leirós.
Cuando en 1942 la CGT se dividió en CGT Nº1 y CGT Nº2, Borlenghi integró el segundo grupo, junto con la mayoría de los sindicatos comunistas.
En 1943, cuando se produjo el golpe de Estado que derrocó al gobierno fraudulento de Ramón S. Castillo, a pesar de que el gobierno militar había disuelto la CGT Nº2 a la que pertenecía, Borlenghi condujo el grupo sindical que estableció contactos primero, y una alianza después, con un sector del ejército que simpatizaba con los reclamos obreros, conducido por el entonces coronel Juan Perón.
Ángel Borlenghi era afiliado al Partido Socialista mantiene una intensa actividad sindical en el gremio de empleados de comercio. Simpatiza con las ideas de Perón.
La batalla de Normandía, llamada en clave Operación Overlord, fue la operación militar efectuada por los Aliados durante la Segunda Guerra Mundial que culminó con la liberación de los territorios de la Europa occidental ocupados por la Alemania nazi. La operación dio comienzo el 6 de junio de 1944, más conocido como el Día D, con el desembarco de Normandía; el conjunto de las operaciones navales recibió el nombre clave de Operación Neptuno. Un asalto aerotransportado llevado a cabo por mil doscientas aeronaves precedió al desembarco anfibio, que involucró a cinco mil barcos. El 6 de junio, ciento sesenta mil soldados cruzaron el canal de la Mancha de Inglaterra a Francia y hacia finales de agosto las tropas aliadas en suelo francés eran más de tres millones.
La decisión de emprender una invasión a través del canal de la Mancha en 1944 se tomó en la Conferencia Trident de Washington D. C., en mayo de 1943. El general estadounidense Dwight D. Eisenhower fue nombrado comandante del Cuartel General Supremo de la Fuerza Expedicionaria Aliada (SHAEF) y el general británico Bernard Montgomery comandante del XXIer Grupo de Ejércitos, que aglutinaba todas las fuerzas terrestres que tomarían parte en la invasión. El lugar elegido fue la costa de la región francesa de Normandía, donde se seleccionaron cinco playas a las que se dieron nombres en clave: Utah y Omaha, que serían atacadas por los estadounidenses, Sword y Gold, objetivo de los británicos, y la playa Juno, lugar de desembarco de los canadienses. Los puertos franceses estaban fuertemente defendidos, lo que motivó la creación de dos muelles artificiales, denominados Mulberry, y para superar las dificultades que se esperaban en las playas se emplearon carros de combate especialmente modificados. En los meses previos a la operación, los Aliados llevaron a cabo una elaborada maniobra de distracción militar, la Operación Bodyguard, usando desinformación tanto electrónica como visual. Con ello consiguieron evitar que los alemanes supieran la fecha y localización de los desembarcos. Adolf Hitler había encargado al reputado mariscal de campo Erwin Rommel la supervisión y mejora de una cadena de fortificaciones costeras conocida como el Muro Atlántico, en previsión del ataque enemigo.
Los Aliados no fueron capaces de alcanzar los objetivos planeados para el primer día, pero sí aseguraron una precaria cabeza de playa que expandieron con tenacidad en los días siguientes, con la captura del puerto de Cherburgo el 26 de junio y de la ciudad de Caen el 21 de julio. El contraataque alemán del 8 de agosto falló y dejó a 50 000 soldados del VII Ejército de la Wehrmacht atrapados en la denominada bolsa de Falaise. El 15 de agosto, los Aliados lanzaron una invasión del sur de Francia, la Operación Dragoon, y el 25 de agosto se produjo la Liberación de París. Las fuerzas alemanas se retiraron por el valle del río Sena el 30 de agosto, lo que marcó el final de la Operación Overlord.
La liberación de París durante la Segunda Guerra Mundial consistió en la entrada de los Aliados en la ciudad de París en agosto de 1944. La batalla comenzó con una sublevación de la Resistencia francesa en la ciudad, a la que poco después se unieron elementos de la 2.ª División Blindada francesa (encuadrada en el Tercer Ejército estadounidense y conocida como División Leclerc) y, en mucha menor medida, de la 4.ª División de Infantería estadounidense.
En esta batalla participaron activamente españoles republicanos exiliados y sobre todo anarquistas, tanto en las filas de la Resistencia como entre las tropas de la 2.ª División Blindada francesa, en papeles destacados, hasta el punto de que las primeras unidades militares aliadas que entraron en París estaban compuestas por antiguos miembros del Ejército Popular Republicano. Se hallaba al frente de las mismas Amado Granell, quien por entonces era teniente del Ejército francés, siendo igualmente antiguo mayor de Milicias del Ejército Popular Republicano, en el que había mandado una Brigada Mixta.
Una de las principales consecuencias políticas de la Liberación de París fue la práctica desaparición de la Francia de Vichy y la consideración del Gobierno Provisional de la República Francesa, con el general Charles de Gaulle a la cabeza, como depositaria de la legitimidad histórica y política de Francia y de la República Francesa. Por otra parte, de Gaulle logró convertirse en el símbolo del renacimiento de la nueva Francia, quedando definitivamente olvidados los intentos de los anglosajones por buscar otro militar o político francés con el que entenderse para reemplazarlo.
La multitud viendo a los blindados de la 2ª División Blindada, y al frente en la foto la semioruga "Kichi-Kichi", con su jefe Destray, el chófer Lambourg y los ocupantes Habermachrer, Thomas, Clermont, Bisson, Aranda y Zidony, desfilando el 26 de agosto de 1944 en la avenida de los Campos Elíseos de París.
El Führer y canciller del III Reich, Adolf Hitler, resulta levemente herido en un atentado perpetrado dentro de su cuartel general, cerca de Rastenburg. El autor del atentado es el coronel Claus Schenk von Stauffenberg.
Tras el atentado y el golpe de estado fallidos, Hitler ordena una amplia operación de limpieza, que significará el final definitivo de la resistencia organizada en el interior del III Reich.
Durante una reunión de análisis de la situación con Hitler y otros 22 participantes, Stauffenberg coloca una cartera que contiene una bomba. El casual desplazamiento de la cartera, así como una mesa maciza de roble, salva la vida de Hitler cuando la bomba explota a las 12.42 horas.
Tras la muerte de Adolf Hitler, el plan preveía declarar el estado de emergencia «Walkiria», originalmente previsto para la movilización de las tropas en la reserva para casos de sublevación dentro del III Reich. Una vez tomado el poder, la resistencia nombraría un gobierno y entablaría conversaciones de paz con las potencias occidentales. Sin embargo, al conocerse la noticia de que Hitler sólo sufre lesiones leves, los conjurados de Berlín se muestran indecisos y dan a las fuerzas fieles al régimen el tiempo suficiente para adoptar contramedidas.
Las tropas del coronel Ernst Remer cercan a los conjurados en el centro administrativo y de mando del ejército de tierra. Los jefes de la conspiración, Stauffenberg, el jefe de la Comandancia, Friedrich Olbricht, el teniente coronel Werner von Haeften y el coronel Mertz von Quirnheim, son fusilados poco antes de la medianoche.
En las subsiguientes acciones de represalia, serán detenidos 7.000 opositores al régimen nazi y 200 de ellos morirán fusilados. La venganza de Hitler también se extenderá a los familiares.
Ana Frank y su familia, que habían permanecido ocultos, son descubiertos por la policía secreta alemana (la Gestapo) y deportados a Alemania. El diario de la muchacha, que escribe desde 1942, es publicado al término de la guerra por unos amigos holandeses y causa consternación en millones de lectores.
Ana, hija de un banquero judío, había nacido el 12 de junio de 1929 en Fráncfort del Meno. Cuando los nazis accedieron al poder , la familia decidió emigrar a los Países Bajos con Ana y su hermana mayor, Margot. Más tarde, tras la ocupación alemaná de los Países Bajos, el padre comenzó a sospechar que serían detenidos y deportados a un campo de concentración, Dor lo oue decidió que todos debían ocultarse.
El 14 de julio, los cuatro miembros de la familia se refugiaron en una casa trasera en la Prinsengracht de Amsterdam, que compartían con otra familia y un dentista judío. En total, ocho personas compartían el reducido espacio de la casita.
Ana Frank, que llegó al escondite a los trece años, escribió durante más de dos años de reclusión un diario, en el que describe las tensiones de la convivencia y sus propios sentimientos. Lo hace en forma de cartas dirigidas a una ficticia «Kitty».
Con una inteligencia y una capacidad de introspección sorprendentes para su edad, plantea su situación como judía perseguida. Describe también su alegiría por las derrotas militares de los alemanes. por la capitulación de Italia y por el desembarco aliado en las costas de Normandía.
En otro lugar, lamenta su suerte como judía: « ¿Quién nos ha deparado esto? ... ¿Quién nos ha hecho sufrir tanto? ... Alguna vez volveremos a ser personas y no sólo judíos.»
La última entrada del diario de la muchacha corresponde al 1 de agosto. Tres días más tarde, a raíz de una delación, la Gestapo irrumpe en la casa trasera don¬de había pasado esos dos últimos años. En marzo de 1945, Ana Frank murió en el campo de concentración de Bergen-Belsen. El único superviviente del grupo es su padre, que en 1945 fue liberado por el Ejército Rojo en el campo de concentración de Auschwitz.
El diario de Ana Frank, de 15 años, conmueve al mundo después de la guerra como documento auténtico del destino de los judíos
Cediendo a presiones británicas, el rey Pedro II Karadordevic de Yugoslavia, en el exilio, nombra al comandante en jefe del Ejército de Liberación Popular, Josip Tito, como jefe único de la resistencia.
El rey ordena a los partisanos monárquicos y anticomunistas de Draza Mihailovic unirse a las unidades mejor equipadas de Tito. De este modo, la lucha por el poder entre los grupos de partisanos yugoslavos acaba con la victoria de Tito.
El 20 de octubre, unidades de partisanos yugoslavas y tropas soviéticas liberan la capital, Belgrado. Los alemanes abahdonan la ciudad y, con combates de retaguardia, se retiran hacia el norte y cruzan el Danubio. Con esta liberación, los combates de los partisanos llegan a su máxima expresión. gasta octubre, las unidades de Tito controlarán la mayor parte del territorio yugoslavo.
El jefe partisano Josip Tito se impone como jefe de la resistencia y libera Belgrado