Los suelos no son simples acumulaciones de sedimentos. Se forman muy lentamente bajo la influencia de cinco factores:
La diferente composición original de los materiales y la acumulación de las sustancias en determinadas zonas permiten que se formen diversos tipos de suelos y que estos, muy frecuentemente, se presenten divididos en capas, llamadas horizontes.
Además de las tres capas ya mencionadas, más específicamente se identifican cinco horizontes que conforman al suelo:
Esquema de corte de un suelo bien desarrollado, dividido en horizontes.
La formación del suelo es el proceso simultáneo al del desenvolvimiento de una sucesión primaria. Comienza con procesos físicos de fragmentación relacionados con la meteorización de la roca inicial o roca madre.
La meteorización puede ser:
Los primeros organismos capaces de vivir sobre una roca poco o nada alterada son los líquenes. Estos organismos contribuyen a la meteorización de la roca debido al dióxido de carbono que desprenden que, mezclado con el agua, forman ácido carbónico que ataca a las rocas. Los restos orgánicos de los líquenes se mezclan con partículas minerales y comienzan a formar suelo fértil.
A medida que la alteración de las rocas progresa, vegetales cada vez más complejos, como los mofos, los helechos y otras plantas crecen. Sus restos contribuyen en su mayoría a la materia orgánica a formar una capa cada vez mayor de humus.
Cuando esta capa desaparece, bien por causas naturales o provocadas, el suelo se erosiona muy rápidamente y pierde las calidades que le permiten el desenvolvimiento de la vegetación.
1 Imaginemos un terreno rocoso en el que apenas hay vegetales: solo crecen algunos musgos y líquenes.
2 Por efecto de la meteorización, las rocas se fragmentan. En algunas zonas se acumula arena y grava. Allí pueden enraizar más musgos y pequeñas hierbas.
3 La meteorización continúa hasta que aparece una capa de arena. Las plantas que crecen sobre ella aportan restos de hojas, que se descomponen y se mezclan con la arena formando el mantillo. Parte de estos restos se arrastran hacia abajo por la lluvia.
4 La vegetación es cada vez más abundante, con lo cual el suelo recibe mayor cantidad de restos y se enriquece: su capa de mantillo aumenta de grosor. Solo hay rocas intactas en el nivel más profundo.
Cambios que se producen en el terreno hasta convertirse en un suelo rico, cubierto de vegetación.