El clima de una región depende principalmente de la latitud, de la cercanía al mar, de las comentes marinas y de la orografía. En función de estos factores, podemos dividir la Tierra en varias zonas con un clima parecido. La vegetación que habita cada zona es parecida, pues las plantas tienen adaptaciones muy parecidas. Además, la fauna también comparte adaptaciones similares en cada zona.
La clasificación climática de Köppen fue creada en 1900 por el científico y meteorólogo ruso de origen alemán Wladimir Peter Köppen, quien posteriormente la modificó en 1918 y la suscribió conjuntamente con Rudolf Geiger en 1936. Consiste en una clasificación climática natural mundial que identifica cada tipo de clima con una serie de letras que indican el comportamiento de las temperaturas y precipitaciones que caracterizan dicho tipo de clima.
Los climas cálidos se dan en la zona cálida de la Tierra, entre el trópico de Cáncer y el de Capricornio.
En esta zona las temperaturas siempre son elevadas, superiores a los 18 °C de media. Pero hay grandes diferencias en las precipitaciones, lo que da lugar a tres subtipos:
Los climas templados se extienden en las zonas templadas de la Tierra entre los trópicos y los círculos polares.
Estos climas se caracterizan por la existencia de cuatro estaciones, con diferencias notables de temperaturas y precipitaciones entre ellas.
Se distinguen cuatro tipos de climas templados:
Los climas fríos se localizan en las zonas frías, por encima de los círculos polares, y en las áreas de alta montaña.
Selva de Borneo. Los bosques tropicales húmedos son típicos de climas ecuatoriales.
Climas continentales .Los árboles caducifolios son las plantas por excelencia de los climas continentales, al ser capaces de soportar el frío del invierno y realizar la mayor parte de su metabolismo en primavera y verano.
El climograma es un gráfico de una entrada en el que se presentan resumidos los valores de precipitación, temperatura y clima recogidos en una estación meteorológica. Se presentan en cada mes del año la precipitación total caída durante el mes y la temperatura media mensual (media de la temperatura media diaria de cada día del mes, y esta a su vez media de la máxima y la mínima en 24 horas), ambas variables en forma de datos medios sobre un número amplio de años observados: unos treinta si se quiere obtener conclusiones climáticas significativas, unos cinco si se quieren estudiar las tendencias coyunturales, o también de un año.
Los climogramas tienen un eje de abscisas donde se encuentran los meses del año, un eje de ordenadas a la izquierda (normalmente) donde se encuentra la escala de las temperaturas y un eje de ordenadas a la derecha donde se encuentra la escala de las precipitaciones. Aunque a veces no se haga así (compruébese en los ejemplos más abajo), la escala de precipitaciones debe ser siempre el doble que la de temperaturas si se quiere que el climograma represente correctamente la existencia o no de estación seca, ya que según el índice de Gaussen el índice de aridez está definido por: Precipitaciones en mm = Temperaturas en °C x 2 (si las precipitaciones en mm son inferiores al doble de la temperatura media en grados centígrados, el mes es seco, mientras que no lo es si resulta una cifra mayor).
En el climograma clásico las temperaturas se presentan en una línea y las precipitaciones en barras. Normalmente se añaden, aparte, los datos de precipitación anual total y temperatura media anual.
El climograma es un gráfico que representa las temperaturas medias y las precipitaciones totales que se han producido en un lugar a lo largo de un año. Los datos se dan en meses. La evolución de la temperatura y precipitaciones indica el clima de ese lugar. De esta forma se puede relacionar la temperatura con la precipitación y conocer la existencia de períodos húmedos y secos.