Operación Black Buck

Durante la Guerra de las Malvinas en 1982, el Reino Unido dio el nombre en código Operación Black Buck (en inglés, Operation Black Buck), a la serie de siete misiones de extremadamente largo alcance encomendadas a los bombarderos Avro 698 Vulcan de la Real Fuerza Aérea británica (RAF), los que partiendo desde la isla Ascensión, atacaban las posiciones argentinas en las islas Malvinas. De estas siete misiones, solamente cinco fueron llevadas adelante. A cada una de esas misiones, se le dio un número correlativo.

Antecedentes

Sin aviones capaces de cubrir la distancia hasta las Malvinas, las actividades en el océano Atlántico Sur hubieran dejado fuera de la guerra a la Real Fuerza Aérea.

El campo de aviación utilizable más cercano para las operaciones de la Royal Air Force en las Malvinas era la isla Ascensión; un territorio británico pero con una pista aérea arrendada a los Estados Unidos. Las misiones de los Vulcan a las Malvinas fueron enteramente dependientes de los Handley Page Victor, utilizados como aviones cisternas para reabastecerlos en vuelo. Estos aviones fueron transferidos desde la base británica de Marham en Inglaterra a la isla Ascensión.

El Avro Vulcan era el último de los bombarderos-V británicos en uso operacional para el bombardeo pero sus escuadrillas estaban en inminente disolución. Basado en el Reino Unido y asignado a la OTAN para las operaciones nucleares, ni el reaprovisionamiento de combustible aire-aire ni el bombardeo convencional había sido practicado por muchos años con esos aviones.

En Marham la fuerza de reaprovisionamiento fue planeada para reabastecer a uno o más bombarderos en ruta hacia las Malvinas y en su regreso. En la Base Waddington de la RAF en Inglaterra, se comenzó la reinstrucción de los equipos en el bombardeo convencional y en el reaprovisionamiento de combustible en vuelo. Los aviones fueron seleccionados por sus motores; solamente aquellos con los motores de más alcance, Bristol Olympus 301, fueron considerados convenientes. Una de las tareas más duras fue reinstalar el sistema de reaprovisionamiento de combustible, que había sido bloqueado.

Un Victor fue convertido en un improvisado avión de foto reconocimiento. Los Victor arribaron a Ascensión el 18 de abril de 1982.

Tres Vulcan de 22 años de existencia pertenecientes a los escuadrones N° 44, 50 y 101 de la RAF fueron desplegados en la base de la isla Ascensión. Los líderes de escuadrón Neil McDougall y John Reeve y el teniente Martin Withers capitanearon a los Vulcan.

Para mejorar las contramedidas electrónicas contra las defensas argentinas, de las que se sabía que incluían el misil Tigercat y armas antiaéreas controladas por radar, los sistemas Dash 10 de los aviones Blackburn Buccaneer de la base de la RAF Honington fueron ubicados en pilones improvisados en las alas. Para navegar a través de los mares sin rasgos distintivos, los sistemas de dirección de inercia fueron pedidos prestados de los VC-10 y de a dos instalados en cada Vulcan.

Los depósito de combustible podían contener 9.200 galones (41.823 litros), y basado en estimaciones de las necesidades de combustible, once Victor, incluyendo dos aviones en espera, fueron asignados para reaprovisionar de combustible a los Vulcan antes y después de sus ataques contra las Malvinas. Cada Vulcan que atacaba fue reaprovisionado de combustible cinco veces en el viaje de ida y una vez en el viaje de vuelta, usando más de 220.000 galones de combustible de aviación durante cada misión. Cada avión llevaba veintiún bombas de 1.000 libras (450 kilogramos) o cuatro misiles antiradares AGM-45 Shrike1​ (Dash 10) con tres depósitos de gasolina auxiliar de 1.000 galones (4.546 litros). Las bombas fueron pensadas para causar daño a las instalaciones argentinas, especialmente al aeropuerto de Puerto Argentino. Se esperaba que los ataques harían a los defensores encender los radares defensivos, que entonces serían apuntados por los misiles. Los Vulcan armados con Shrike eran más ligeros y podían maniobrar en el área con más comodidad que los Vulcan armados con bombas.

A pesar del intenso bombardeo la pista fue apenas deteriorada, lo que contribuyó a eso fue el ingenio y astucia de los argentinos que pintaron cráteres en la pista para hacer creer a los británicos que ya se encontraba incapacitada. Fue después de la guerra que los ingleses se dieron cuenta de la treta.

Avro 698 Vucan

Durante la Guerra de Malvinas operó sobre la zona en conflicto partiendo de la isla Ascensión, en largas misiones de combate de más de 12 000 km con varios reabastecimientos de combustible en vuelo, en el intento de destruir la pista de aterrizaje de Puerto Argentino mediante bombas convencionales, así como el radar de control aéreo Westinghouse AN/TPS-43 mediante misiles anti-radiación AGM-45 Shrike, demostrando que el territorio continental argentino estaba a distancia de ataque de la RAF y provocando la reserva de unidades aéreas para la defensa de Buenos Aires. se realizaron cinco misiones, bajo el nombre en clave de "Operación Black Buck"; tres contra la pista de aterrizaje y dos contra el radar, abortándose además una misión de cada tipo. Durante uno de los vuelos de regreso a Ascensión, el avión atacante se vio obligado a desviarse a Río de Janeiro, después de que su sonda de reabastecimiento en vuelo se rompiera, siendo internado por las autoridades brasileñas durante nueve días.
Aunque se mostraron algunos daños en la pista, la precisión y eficacia de las bombas dejó muchas dudas en el bando británico, además de ser responsable de las únicas dos bajas civiles en la guerra. La pista de aterrizaje de Malvinas continuó operando hasta horas antes de la rendición, en las que despegó el último vuelo de un C-130 Hercules de la Fuerza Aérea Argentina. En cuanto a los ataques contra el radar de control aéreo, no consiguieron ponerlo fuera de servicio dado que los argentinos lo desconectaban previsoriamente cada vez que sufrían un ataque, si bien como daño colateral ocasionaron la destrucción de un radar de defensa aérea Skyguard, matando a sus cuatro operadores.

Misiones

Black Buck I

El primer ataque por sorpresa a las islas tuvo lugar entre el 30 de abril y el 1 de mayo. Estaba destinado a la pista principal del aeródromo de Puerto Argentino/Stanley. Se transportaron 21 bombas de uso general de 1000 libras cada una. El bombardeo se realizó atravesando la línea de la pista a unos 35 grados. El sistema fue programado para soltar secuencialmente a 10 000 pies para que al menos una bomba cayera sobre la pista.

Para la misión, dos Vulcan despegaron de la base de la RAF en la isla Ascensión, el XM598 fue el líder con el XM607 como la reserva. Poco después de despegar, el XM598 comandado por John Reeve sufrió un fallo de presurización (un sello de caucho sobre la ventana lateral de visión directa falló), y el avión se vio obligado a regresar a Ascensión. El XM607, capitaneado por el teniente de vuelo Martin Withers, se hizo cargo de la misión.

Uno de los Victor regresó a Ascensión por un defecto en el sistema de la manguera de reabastecimiento y su lugar fue tomado por un avión de reserva.

El Vulcan estaba excedido de su peso normal máximo de despegue, pues cada uno llevaba equipamiento adicional, tales como el DASH 10 y un baño químico, y un instructor de gran experiencia en reabastecimiento en el aire de la fuerza de aviones Victor, por lo que el combustible utilizado fue mayor de lo esperado. Como resultado de la demanda de combustible y los problemas con el repostaje en vuelo, dos de los Victor tuvieron que volar más al sur de lo previsto, consumiendo sus propias reservas, y uno de ellos, el último Víctor que debía repostar al Vulcan fue pasado al último tramo antes de regresar a la base. Ambos Victor necesitaron ser repostados para poder regresar a Ascensión.

El XM607 realizó la fase de aproximación final en alrededor de 300 pies sobre el nivel del mar. Antes de subir a la altura de ataque el radar H2S fue exitosamente bloqueado para compensar los marcadores de la costa y el bombardeo manipulado por el sistema de control. El ataque fue realizado alrededor de las 4 am, hora local.

El XM607 se alejó ascendiendo del aeropuerto y se dirigió casi derecho al norte a una cita prevista con un Victor cerca de la costa de Río de Janeiro. Cuando esto pasó, el British Task Force señaló la clave "superfuse", indicación de un ataque acertado. El viaje continuó hacia el norte siguiendo la costa sudamericana hacia otra cita con un Victor. Para ayudar al regreso de los dos aviones, un avión de reconocimiento marítimo Hawker Siddeley Nimrod fue enviado al área. El XM607 hizo el acoplamiento y pudo volver a Ascensión.

Northwood recibió el mensaje "superfuse" a las 8:30 y el MOD poco después. Las noticias del bombardeo fueron divulgadas sobre el servicio mundial de la BBC antes de que el Vulcan y el último Victor llegaran a Ascensión.

La línea de 21 bombas cruzó el campo de aviación y ahuecó con éxito la pista con un solo impacto directo cerca de su mitad. Sin embargo, todavía siguió siendo operacional para los transportes C-130 Hércules argentinos. Las bombas que cayeron a ambos lados de la pista causaron daño leve a las instalaciones adyacentes en el perímetro del aeropuerto.3​ Esto era debido a la dispersión cuidadosa del equipo por el comandante de la base. El ataque tomó a los argentinos (así como el resto del mundo) totalmente por sorpresa.

Withers recibió la cruz de vuelo distinguido para su participación en la acción. Tuxford que había pilotado al último Victor para reaprovisionar XM607 de combustible, recibido la cruz de la fuerza aérea

Black Buck II

Durante la noche del 3 al 4 de mayo, el XM607 (volado por John Reeve y su tripulación del Escuadrón Nº 50) voló una misión idéntica a la primera. Este ataque fue dirigido al área del extremo occidental de la pista de aterrizaje de Puerto Argentino. Su intención fue la de prevenir que los ingenieros argentinos extiendan la pista lo suficiente como para hacerla capaz de acoger aviones de combate de alto rendimiento.El XM598 actuó como reserva de vuelo.​

Black Buck III

La misión, planeada para el 13 de mayo con los Vulcan XM612 y XM607, fue abortada antes del despegue debido a los fuertes vientos de proa.

Black Buck IV

Un AGM-45 Shrike misil antirradar sobre una carretilla.

Esta misión con el Vulcan XM597, planeada para el 28 de mayo, fue también abortada 5 horas después de que el Vulcan hubo despegado. Uno de los aviones Victor, que debía reabastecerlo, sufrió una falla de su unidad de abastecimiento, y el vuelo tuvo que ser retornado. El XM598 actuó como avión de reserva.

La misión iba a ser la primera en utilizar los misiles antirradares AGM-45 Shrike suministrados por los Estados Unidos, que fueron montados en los Vulcan en forma improvisada.

Black Buck V

Esta misión, pilotada el 31 de mayo por el líder de escuadrilla Neil McDougall y su equipo del Escuadrón 50 en el XM597, fue la primera misión exitosa equipada con los misiles antiradar AGM-45A Shrike. El blanco principal fue un radar 3D Westinghouse AN/TPS-43 de largo rango que la Fuerza Aérea Argentina desplegó durante abril para vigilar el espacio aéreo que rodeaba a la Malvinas. Para que los misiles lo pudieran alcanzar, el radar debía transmitir señales hasta el momento del impacto. El primer misil impactó a 10 metros del blanco, causando daños de menor importancia al montaje de la guía de la onda, pero no inhabilitando el radar.8​ Temiendo un nuevo ataque, los operadores argentinos utilizaron la simple contramedida de apagar el radar para prevenir su destrucción. El radar AN/TPS-43 siguió estando operativo durante el resto del conflicto. El Vulcan XM598 actuó como avión de la reserva.

Black Buck VI

Esta misión, de nuevo conducida por Neil McDougall en el avión XM597, atacó el 3 de junio y destruyó un radar de control de tiro Skyguard del Grupo de Artillería de Defensa Aérea 601 (GADA 601) del Ejército Argentino, matando a 4 de los operadores: un oficial, un sargento y dos soldados.8​ En su vuelo de regreso, el avión se vio obligado a desviarse a Río de Janeiro en el Brasil después de que su sonda de reabastecimiento en vuelo se rompió. Uno de los misiles que transportaba fue arrojado al océano para reducir la resistencia al avance, pero el otro misil no pudo ser descartado. Los documentos sensibles que contenían información clasificada fueron lanzados al mar a través de la escotilla de la tripulación, y se envió la señal internacional de ayuda "Mayday". La aeronave fue autorizada a tomar tierra por las autoridades brasileñas con menos de 2.000 libras de combustible remanente, lo que apenas era suficiente como para completar el circuito del aeropuerto.9​ El avión fue internado durante nueve días, permitiéndoseles partir al avión y a la tripulación el 11 de junio, sin embargo, el misil Shrike que permanecía en el avión fue confiscado por Brasil y nunca fue devuelto al Reino Unido. El avión XM598 actuó como reserva de vuelo.

Black Buck VII

La misión final de la Operación Black Buck (el XM607 pilotado por el teniente de vuelo Martin Withers10​) fue realizada contra las posiciones de las tropas argentinas cerca de Puerto Argentino el 12 de junio, sin alcanzar el objetivo. Solo provocó algunos cráteres en el extremo este de la pista aérea y causó un daño relativo en los almacenes y a las instalaciones del campo de aviación. Debido a que la incursión de bombardeo fue realizada en un punto tan tardío de la guerra, la RAF no se arriesgó a dañar la extensión de la pista. Esa pista sería luego importante para las operaciones de los aviones F-4 Phantom II de la RAF cuando las islas de Malvinas volvieran al dominio británico. Las fuerzas de tierra argentinas se entregaron dos días después. El avión XM598 actuó como reserva del vuelo.

Misil AGM-45 Shrike.

Los Shrike de la RAF fueron instalados a bombarderos Vulcan modificados con el propósito de atacar a las instalaciones de radar argentinas durante la Operación Black Buck. El blanco principal era un radar 3d de largo alcance Westinghouse AN/TPS-43 que la Fuerza Aérea Argentina desplegó durante abril para vigilar el espacio aéreo que rodeaba a las Malvinas. Los operadores argentinos estaban conscientes del uso de esto misiles antirradar y simplemente lo apagaban cuando se aproximaban los Vulcan. Este radar permanecería intacto durante todo el conflicto. Sin embargo, las defensas aéreas permanecieron operacionales durante los ataques y los Shrike impactaron a dos de los radares de control de fuego que eran menos valiosos y que fueron rápidamente reemplazados. También, después de un aterrizaje de emergencia de un Vulcan realizado en Río de Janeiro, las autoridades brasileñas confiscaron un Shrike que nunca fue retornado.


El XM607 fue el primer Vulcan que participó en la Operación Black Buck.

El XM607 fue el primer Vulcan que participó en la Operación Black Buck.