Se denomina dunas costeras a un ecosistema terrestre que se ubica sobre una franja de ancho variable que ribetea las costas del mar acompañando al litoral marítimo
Se asienta sobre suelos con elevado porcentaje de arena, presentando características geoformas en forma de dunas o médanos, tanto fósiles —los ubicados hacia el interior—, como vivos —en las exposiciones más próximas a la ribera marítima—.
Estas formaciones de notables características escénicas, cumplen funciones claves en el ambiente costero. Además de poseer una comunidad particular (con algunos endemismos) desempeña irreemplazables funciones de protección costera frente a la erosión por el oleaje marino (particularmente durante las tormentas), y garantiza constantes aportes de arena que implican el natural reabastecimiento de las playas, lo que permite que estas sean amplias (ideales para el turismo de tipo balneario y de recreación) incluyendo la función de captación en acuíferos costeros del agua de lluvia.
Vegetación de las dunas costeras en el delta del Ebro, España.La colonización de las dunas costeras está limitada por la movilidad del sustrato.
Cuando se recorre un sistema de dunas desde la línea de costa hacia el interior, se observan de forma sucesiva los siguientes ecosistemas:
El concepto de sucesión hace suponer que todos estos ecosistemas que se suceden en el espacio, lo hacen también en el tiempo. O sea, el bosque que encontramos sobre una antigua duna fue un matorral, que a su vez se formó en una duna gris, que provenía de una amarilla.
El sustrato arenoso solo permite la presencia de plantas capaces de vivir con muy pocos nutrientes y de aprovechar el vapor de agua que se condensa en los espacios que hay entre los granos de arena, como consecuencia de los cambios de temperatura. Con la colonización de estas especies, el sustrato se empieza a fijar por medio de los rizomas y raíces que, al morir, lo enriquecen con materia orgánica. Poco a poco, el sustrato se hace más rico y permite la vida de especies con más requerimientos nutritivos. A medida que evoluciona el sustrato se van instaurando ecosistemas más próximos a la etapa clímax, que en este caso es el bosque.
Zona de frontera
La zona frontera es aquella que está en contacto entre dos ecosistemas diferentes. Presentan gran biodiversidad, ya que en ellas conviven los seres vivos de los ecosistemas colindantes.
Se han hecho esfuerzos importantes en la búsqueda de parámetros que varíen de forma regular y previsible a lo largo de la sucesión, y que además resulten fáciles de medir.
Por ejemplo, en los ecosistemas planctónicos, los muestreos obtenidos con red permiten contar el número de células de cada especie y con ello estimar la biomasa.
Con la distribución de las células en especies, se pueden calcular índices de diversidad, cuyo significado es fácilmente comprensible al considerar que sus valores serían mínimos cuando todas las células fuesen de la misma especie y máximos cuando cada célula fuese de una especie diferente. Además, con muestras incubadas se puede medir la producción primaria.
Todos estos parámetros son medidas globales del ecosistema planctónico que sirven para descubrir los siguientes hechos en la sucesión:
Por desgracia, muchos de estos parámetros son mucho más difíciles de medir en los ecosistemas terrestres, especialmente en los que alcanzan un mayor nivel de complejidad.