El país asistió a la primera transmisión del mando presidencial de conformidad con lo establecido en la Constitución. Al hacer entrega del poder a su sucesor, Urquiza pronunció un discurso en el que dijo entre otras cosas:
"Doctor Derqui: Coloco sobre vuestros robustos hombros, con entera confianza, el depósito sagrado del poder que los pueblos me confiaron, desprendiéndolo de los míos con placer.
Este es un día de gran regocijo para los buenos ciudadanos, porque se cumple la más importante prescripción constitucional y porque la manera como se cumple hace lucir la firmeza de nuestras instituciones salvadoras. .
Habéis subido al poder con resistencias, porque vuestra elección ha sido libre. Con vos, ha triunfado la ley: olvidad todo lo que ha pasado antes de vuestro ascenso. Sois desde hoy un hombre nuevo en el puesto que desde este momento ocupáis.¿Queréis acabar con la oposición que habéis tenido? Confundid desde hoy sus partidarios con los vuestros. Mi vida entera os presenta un ejemplo que puedo ofreceros sin inmodestia.”
Santiago Derqui y Esteban Pedernera asumieron la presidencia y la vicepresidencia en Paraná la provincia de Entre Ríos había sido federalizada durante la presidencia de Urquiza, pero en 1860 había reasumido su soberanía, dejando como territorio federalizado únicamente la ciudad de Paraná. La capital entrerriana se estableció en Concepción del Uruguay, y Urquiza fue nuevamente elegido gobernador.
Veterano de la guerra de la independencia, había nacido en San José del Morro, provincia de San Luis, el 25 de diciembre de 1796. Se incorporó en 1815 al regimiento de granaderos a caballo y asistió a las batallas de Chacabuco, Cancharrayada, Maipó y sur de Chile; actuó luego en la campaña del Perú brillantemente y regresó al país en 1826 con el grado de coronel. Al mando de un regimiento de caballería, tomó parte en la guerra contra el imperio del Brasil. Después de la misma se incorporó a la división del general Paz, que penetró en las provincias del interior en 1829, y asistió a las batallas de San Roque, La Tablada, y Oncativo. Después de la derrota tuvo que emigrar a Bolivia y Perú; en este país se le reconocieron sus antiguos ser-vicios. Volvió a la lucha contra Rosas en 1840 y acompañó a Lavalle en la campaña que terminó con su muerte en Jujuy, y luego con el traslado de sus restos a Potosí por el grupo de sobrevivientes. Volvió a prestar servicios militares en Perú desde 1843- a 1855. Nuevamente en el país, fue senador en el Congreso de Paraná en representación de su provincia, de la que fue electo gobernador en 1859, cargo al que renunció para asumir en marzo de 1860 la vicepresidencia de la Confederación.